ALIMENTOS PARA UNA SEXUALIDAD SALUDABLE

Aunque, ciertamente, no existen alimentos ni sustancias milagrosas o mágicas para aumentar y potenciar tu apetito sexual, sin embargo, sí existen algunos que resultan eficaces para darle un impulso de energía a nuestro cuerpo. Todo el mundo sabe que el estrés y el cansancio no son buenos amigos para nuestra actividad y, mucho menos, para el sexo. El mundo de la Psicología dice que para que pueda existir actividad sexual debe haber una cierta energía sobrante, por lo que debemos tener fuerzas suficientes para poder ser unos buenos amantes.
VITAMINAS C Y E: La vitamina E actúa directamente sobre los órganos reproductores y la C sobre las glándulas endocrinas,
El zinc es otro de los oligoelementos fundamentales en la producción hormonal. Varios estudios han relacionado su insuficiencia con impotencia y frigidez. La histamina es otro de los elementos clave para la actividad sexual. Se ha comprobado que su escasez aumenta la dificultad de alcanzar el orgasmo, tanto en hombres como en mujeres; problema que se puede solucionar con cantidades suficientes de vitamina B6, B12 y de ácido fólico. La vitamina E está íntimamente relacionada con la fertilidad y la sexualidad. La principal fuente de vitamina E son las partes reproductivas de las plantas, las semillas oleaginosas y el germen de los cereales.
Por ejemplo, muchas personas experimentan una notable intensificación de las sensaciones tomando polen. El guaraná aumenta el tono vital, sobre todo el sexual. El ginseng por su parte es tonificante, ayudando a mantener el rendimiento físico y la resistencia a la fatiga, muy recomendable para la actividad sexual.
GINSENG: Un té tibio, quince minutos antes de empezar la sesión.
El ginseng tiene efectos tonificantes y estimulantes sobre el cuerpo, en concreto sobre las glándulas andrógenas. Ayuda a resistir el calor, el frío, las infecciones y el estrés. Combate la falta de vitalidad ayudando al organismo a afrontar las dificultades sin disminuir las fuerzas. También es eficaz en el tratamiento del agotamiento psíquico y físico y de la debilidad derivada del estrés (agotamiento nervioso).
Los alimentos tienen unas cualidades energéticas en sí mismos. Por ejemplo, los de origen animal son potenciadores del apetito sexual, mientras que los vegetales pueden llegar a disminuirlo.
Otro punto interesante a tener en cuenta, es el modo en que se cocinan los alimentos. Cuanta más cocción y a más alta la temperatura, más se potenciará un estado anímico propicio para las relaciones sexuales. Por el contrario, una dieta con altos contenidos de azúcares, alcohol, dieta vegetariana desequilibrada o una gran cantidad de crudos, enfría internamente y crea un bajo tono vital, pasividad y poca respuesta.
SOJA: Suele restaurar las disfunciones sexuales.
Todo tiene su cara y su cruz; al igual que hay alimentos que potencian el apetito y la actividad sexual, existen otros que lo inhiben. La soja, por ejemplo, es considerada como enfriadora. La soja, cuando no está fermentada, tiene elementos inhibidores de la tiroides, lo que repercute en la actividad sexual.
GINKGO BILOBA: Mantiene el órgano viril en plena forma, una y otra vez, por lo que se puede repetir si la pareja lo desea.
El gingko es un potente antioxidante. Evita la degeneración del organismo, la pérdida de neuronas y la obstrucción de los vasos sanguíneos. Está indicado para la pérdida de memoria producida por insuficiencia del riego en el cerebro. Reduce la fatiga intelectual e incluso el colesterol. La medicina china recurre a él y los monjes budistas lo plantan al lado del sagrado arbusto del té.
JALEA REAL. Es un estimulante en general y por supuesto genital, tarda algo en hacer efecto, pero los resultados son seguros y prolongados.
MIEL: Era costumbre regalar a los novios jarras con miel para que tuvieran éxito las primeras relaciones.
POLEN: Tarda en hacer efecto al menos cinco días.
AZÚCAR MORENO: Una ligera hiperglucemia es beneficiosa para el amor, la falta de azúcar provoca una mayor producción de adrenalina y esta hormona bloquea cualquier respuesta favorable al sexo.
APIO: Actúa sobre el sistema urinario, con moderado efecto afrodisiaco, sobre todo su caldo. Unido a la remolacha aumenta su efecto, pero con la lechuga se anulan.
CANELA. Añadida a los licores suaves el efecto es seguro e inmediato.
ALCACHOFA: Sirve para mantenerse en forma
PLÁTANO: Nos repone las fuerzas para intentarlo de nuevo.
DÁTIL: La seguridad de su efecto es total.
PIPAS DE CALABAZA: Actúa más que nada en los varones sin fuerza.
DIENTE DE LEÓN: Potente restaurador de las energías perdidas
LECHUGA: No la tomes para hacer el amor, pues te dormirás en sus brazos.
FRAMBUESA: Es más adecuada para la mujer ya que contribuye a relajar los órganos sexuales y facilita el acto amoroso en el varón.
MALVA: Tomándola en infusión nos relaja la tensión, al mismo tiempo que aumenta la pasión.
MANZANA: Primer afrodisiaco conocido, a Eva le dio muy buenos resultados.
MENTA: Los combinados con pipermín han sido muy famosos estimulantes del amor.
PIMIENTA. Remedio rápido e infalible, se añade al zumo de tomate o alguna bebida.
PEREJIL: Imprescindible en las ensaladas de amor
PISTACHO- Mezclado con avellanas e higos
ROMERO: Unido a la menta en infusión es un tonificante para después de la cena
TRUFA: Alimento eficaz aunque caro
SALVIA: En la Grecia antigua se decía que daba la vida eterna, aunque su efecto más buscado era para el placer.
REGALIZ: La mujer que come regaliz es apasionada.
SANDIA: La parte blanca de la sandia tiene propiedades favorecedoras de la erección.
Hay cuatro minerales que no pueden faltar en una alimentación completa y sana porque el cerebro, sin ellos, es incapaz de realizar sus funciones de manera lógica y equilibrada:
El cobre facilita el correcto funcionamiento del sistema nervioso central. Está muy extendido en la naturaleza: en el hígado de los animales, algunos pescados y moluscos, legumbres y frutos secos.
El fósforo estimula y tonifica las células y la energía cerebral y nutre la mente a través del sistema nervioso, sanguíneo y muscular. Se encuentra en casi todos los alimentos: carne, pescado, queso, cereales,…
El hierro es indispensable para que el cerebro aumente su resistencia física y mental y para la producción de energía. Está en la carne, las semillas de calabaza, el perejil y las almendras.
El magnesio regula el sistema nervioso simpático y parasimpático, estimula la memoria y retrasa el envejecimiento. Se puede hallar en el mar, en forma de sal, y en los frutos secos.
Todos estos alimentos están relacionados en particular con el sabor primario «dulce» y se dice que tienen la capacidad de estimular los senti¬mientos creativos y eróticos. Forman parte de esta categoría la leche, la miel, los cereales, la fruta, los frutos secos, las verduras y las legumbres.
Los alimentos que producen calor y desencadenan pasión, provocan el sentimiento apasionado. Esta categoría inclu¬ye todos los alimentos que calientan y estimulan, como las raíces vegetales, las especias, la sal, la mayoría de los pescados, la carne roja y el pollo. Estos alimentos están relacionados en particular con los sabores primarios salado y picante, así como, con combinaciones de sabor que incluyan el dulce.
Alimentos a evitar
Las comidas frías y rápidas, refrescos, alimentos procesados y enlatados y los aperitivos. Los alimentos azucarados como los pasteles, las galletas y los helados. Los productos lácteos como el queso, el yogur y la leche.
El alcohol cuando se sobrepasa de un límite es perjudicial para la salud.
La cafeína que se encuentra en el café, el té, el chocolate y los refrescos de cola, el efecto inmediato es beneficioso, pues ayuda a mejorar la agudeza mental y el rendimiento, pero aumenta la tensión arterial y agrava la ansiedad.
El chocolate eleva el ánimo, estimula la secreción de serotonina y endorfinas (sedantes naturales), y aumenta la producción de feniletilamina relacionada con los estímulos emocionales, sin embargo su consumo excesivo deteriora la salud por las grasas y azucares.
Las grasas del consumo de precocinados y alimentos de preparación rápida.
Ingerir sal en exceso contribuye al aumento de la presión arterial.
Hay alimentos que embotan los sentidos, lo que desencadena emociones negativas. Algunos de ellos son la carne roja, el alcohol y los champiñones. Evocan los sentimientos furiosos y destructivos. En esta categoría se incluyen todos los alimentos que tras¬tornan o distorsionan los sentidos, ya sea debido a su excesivo sabor picante, amargo o astringente, o mediante putrefacciones internas. Los alimentos particularmente fuertes, como las cebollas, el ajo y los pimientos, así como las comidas cocinadas con aceite muy denso o fritas en abundante aceite, crean sentimientos destructivos a menos que sean prepa¬radas con un gran conocimiento y mucho cuidado. Las carnes fuertes y los huevos entran en este grupo; en general, pertenece a esta categoría cualquier alimento que produzca olores o ventosi¬dades corporales en exceso. Los alimentos desequilibrados o rancios entran en esta categoría.
Alimentos saludables
Una dieta equilibrada que incluya fruta y verduras, nueces féculas, pescado, carne y volatería (moderadamente). Los alimentos ricos en vitamina B, C y E, en magnesio, potasio, calcio, cinc y fósforo.
Los carbohidratos de los cereales, el arroz, la pasta, el pan y las patatas, que proporcionan fuentes de energía de combustión lenta.
Las frutas y verduras, fuente de vitaminas y minerales que refuerzan el sistema inmunitario. Las frutas proporcionan potasio que ayudan a mantener la presión arterial.
Infusiones como la manzanilla, la melisa, la verbena, la tila y la flor de lima o de naranjo, tienen efectos sedantes.
Tónicos herbales como el jengibre que facilita la digestión y el gingseng que intensifica la función suprarrenal, afectada por el estrés. El laurel también tiene efectos calmantes.