Como siempre, preparar entre ambos
vuestro espacio intimo para que os resulte confortable, sensual y que nada os
pueda interrumpir.
Desnudaros el uno al otro lente y
sensualmente y acomodaros. Primero cada uno acariciará su cuerpo en orden
creciente de zonas de intensidad erótica, desde la cabeza a los genitales. Cada
uno acariciará con sensualidad sus genitales disfrutando de las sensaciones
placenteras, utilizando lubrificante liquido, inicialmente con toques suaves,
incrementando la presión según vallan aumentando las sensaciones sexuales. La
mujer extiende la lubrificación sobre el clítoris.
Respirar de forma rítmica y en creciente
tensión sexual. Cuando sintáis suficiente tensión, comenzar con los movimientos
pélvicos hacia atrás y hacia arriba. A la vez que observáis como se estimula el
otro y manteniendo este contacto visual mientras se incrementan las sensaciones
sexuales. Cuando os sintáis llegar al punto de no retorno de vuestro orgasmo,
parar la estimulación dejando que la tensión disminuya y antes de que
desaparezca del todo, os volvéis a estimular para recuperar la excitación.
Repetir tres veces el proceso y a la cuarta vez dejáis descargarse la ola orgásmica.
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