Consulta de psicología y sexología

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viernes, 7 de marzo de 2014

JUEGOS QUE AYUDAN EN LAS DIFICULTADES PARA EYACULAR

El trastorno orgásmico masculino (también conocido como orgasmo masculino inhibido o eyaculación retardada) se caracteriza por la dilación persistente y recurrente de la eyaculación, tras una fase de excitación sexual normal, durante la relación sexual. Esta dificultad puede darse en todas las situaciones o sólo en algunas específicas y provoca malestar acusado o dificultades en las relaciones interpersonales.
Las causas de la anorgasmia masculina, atienden con mayor frecuencia a causas psicológicas, que impiden llegada al orgasmo, aún así podrían existir o coexistir alguna causa médica que habría que descartar previamente. Mientras que la eyaculación retrógrada, que puede tener el orgasmo pero sin emisión de semen, atiende con más frecuencia a problemas orgánicos y requiere de tratamiento médico, se puede observar en pacientes diabéticos, con el uso de algunos psicofármacos y posterior a una prostatectomía (esterilización masculina). Con frecuencia las sensaciones placenteras del orgasmo se mantienen.
Dentro del problema de anorgasmia masculina debido a causas psicogénicas, estas pueden ser debidas a la distracción o bien al intentar ejercer excesivo control sobre la situación. Situaciones que son compartidas con las dificultades orgásmicas de la mujer. Los actos de orinar, defecar, eyacular, así como el orgasmo, dependen de reflejos transmitidos por medio del sistema nervioso autónomo, y normalmente se encuentra bajo el control la voluntad. Cuando el hombre está en un estado de excitación emocional, o bajo el dominio de un conflicto psicológico, puede surgir una reacción defensiva involuntaria que inhibe dichos reflejos; esta reacción defensiva implica un exceso de control, decir, la incapacidad de liberar el reflejo del control cortical.
La distracción como causa de la anorgásmia en el hombre o la mujer, es debida a la falta de habilidad para centrarse en las sensaciones sensuales, teniendo la mente ocupada  en  pensamientos sobre las actividades cotidianas ajenas a la sexualidad, o centrada en pensamientos y rumiaciones recurrentes y excesivas.
No podemos omitir la inhibición de la parte subjetiva del orgasmo que se presenta en esta disfunción. Muchos hombres y mujeres se aferran, quizá de forma inconsciente, a la creencia de que el hombre debe conducir el sexo, o que la mujer es menos sensible sexualmente que el hombre, y que su orgasmo y el placer sexual son algo que él "debe darle" y, en consecuencia, que si no puede brindarle placer sexual o satisfacción, entonces él ha fallado como amante y "quizá como hombre".
Otra causa psicológica habitual en este problema, es el auto boicot que se hace de forma inconsciente la persona, por no sentirse merecedora o por considerar inapropiada la recompensa placentera que supone la descarga orgásmica. Esto puede observarse en conductas de la vida cotidiana, en las cuales la persona afectada rehúye de las gratificaciones, premios o el reconocimiento del éxito personal o profesional.
Los hombres ven muy a menudo las disfunciones como algo que deben resolver por ellos mismos. Hay toda clase de suposiciones de los varones sobre la masculinidad.
Muchos hombres ven como un fracaso si pierden o disminuye en ellos el deseo sexual, si no pueden lograr una erección y eyacular a voluntad, y no son propensos a discutir lo que ven como sus fracasos con sus parejas.
El manejo médico de la causa biológica, apoyada por la terapia sexual, mejora la disfunción. En este caso, la terapia sexual está encaminada a establecer tareas que faciliten la disminución de la ansiedad que provoca la búsqueda del orgasmo; motivándose al autoconocimiento corporal, principalmente experimentando y conociendo sensaciones placenteras individuales y en pareja.
Con estos ejercicios, conseguirás distraer la excesiva necesidad de control de la eyaculación de modo que los reflejos orgásmicos se liberen sin obstáculos, y explorar las creencias de tu cultura, religión o algún indicio experiencias negativas durante la infancia o adolescencia, que condicione este problema, en este caso, tal vez necesitarás recurrir a un terapeuta especializado.

Recuerda que el objetivo de estos juegos es ayudarte a centrarte en las sensaciones sensuales, abandonarte y despreocuparte de tus pensamientos, por todo ello has de realizar estas actividades en el orden progresivo que se exponen, sin objetivos, sin pretensiones y sin autoanalizarse durante la realización de los ejercicios.




Juegos recomendados:
·        Relajación previa
·        Relajación para reducir el estrés sexual
·        Percepción de las sensaciones corporales
·        Percepciones sexuales
·        Masajes sensuales
·        Estimulación sensual con fantasía romántica
·        Estiramientos
·        La musculatura pubococígea
·        Respiración sexual
·        Anatomía sexual
·        Ejercitación de movimientos pélvicos
·        Balanceo de la pelvis
·        Ejercicio para centrarte en tu autoestimulación
·        Autoestimulación sexual
·        Estimulación sexual con fantasía
·        Ejercicio de la mariposa
·        Familiarizarse con el umbral del orgasmo
·        Ejercicio para superar los bloqueos
·        Autoplacer uno frente al otro
·        Exploración sexual con afectividad
·        Autoplacer con ayuda
·        Estimulación sensual por la pareja
·        Proporcionar placer a la pareja
·        Masaje erótico
·        Estimulación mutua con contacto genital
·        Coito con autoestimulación y afectividad
·        Coito con mutua estimulación
·        Juegos para desinhibirse
·        Fortalecimiento de los genitales
·        Coito sin limitaciones
·        Juegos sexuales de libre creación

·        Técnica de la serie de nueves

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